ACPE viaja a la Ruta Milenaria del Atún. CADIZ. Por Sully Fuentes.
En Fitur 2015 fue presentada La Ruta Milenaria del Atún, «un proyecto turístico integral» promovido por el Grupo de Desarrollo Pesquero Cádiz-Estrecho y desarrollado por asociaciones de empresarios y comerciantes de las localidades gaditanas de Conil de la Frontera, Barbate, Zahara de los Atunes y Tarifa. Es en ese momento cuando ACPE entra en contacto con la Asociación de Empresarios de Barbate y muestra su interés por conocer la milenaria ruta.
La Asociación de Empresarios de Barbate junto a los otros pueblos que comprende el proyecto con el apoyo de Desarrollo Pesquero Conil- Estrecho, junto a Viajes La Janda han hecho un itinerario especial, abarcando gran parte del sector productivo de la zona para que corresponsales de Alemania, Argentina, Austria, Francia, EE.UU, Finlandia, México, Uruguay pudiesen vivir durante tres intensos días (del 29 al 31 de Mayo), la milenaria ruta del atún a través del arte de pesca más antiguo del mundo: el de la pesca de almadraba.
Esta privilegiada zona que visitamos incluye entre otros municipios de Barbate, Conil de la Frontera, Zahara de los Atunes y Tarifa comparte una riqueza natural única y singular. Mar y arena, fauna y flora conviven en cinco ecosistemas propios – marismas, acantilado, pinar, salinas y dunas. En cuanto a la vida animal es el centro de las rutas migratorias tanto de aves como de distintas especies marinas lo que la convierten en punto de referencia para observaciones ornitológicas y avistamientos de cetáceos. Si a ésto le agregamos un acervo cultural milenario que implantaron los fenicios, cartagineses, etc., podemos decir que CADIZ posee muchas historias para relatar.
Es en mayo y primeras semanas de junio donde la actividad pesquera en la costa atlántica gaditana se hace más intensa por la captura del atún rojo ( “Thunus Thynnus”) por medio de la ancestral modalidad de la almadraba.
La Organización de Productores Pesqueros de Almadraba (OPP) entiende la almadraba como el arte fijo de pesca dedicado a la captura de atunes y otras especies de túnidos, compuesta por un armazón de cables con flotadores en superficie y fijado al fondo con anclas que permiten la verticalidad de las redes que cuelgan de los cables. Este arte se sitúa en lugares donde tradicionalmente se ha observado el paso de las “balsas” o “cardúmenes” de túnidos, con el fin de lograr que entren en el “laberinto” de redes hasta llegar al “copo” o lugar donde se realiza la “levantá” y de este modo proceder a sus capturas.
Este viaje ha permitido a través de interesantes visitas conocer “in situ” las almadrabas atuneras, espectacular pesquería artesanal, a través del trayecto en barco –de forma excepcional- a las almadrabas de Barbate, gracias a que el tiempo y las condiciones del mar lo permitieron. Nos han explicado el arte del “ronqueo del atún” (despiece), nos han permitido apreciar y disfrutar el abanico paisajístico de este tramo de costa que va del Cabo de Trafalgar a Punta Camarinal.
Hemos podido conocer conservadoras de atún para comprender el proceso de industrialización artesanal, según los usos y costumbres (salazones, ahumados, conservas). En Conil visitamos una antigua chanca, una lonja, así como mercados de abastos, una subasta tradicional de verduras, un museo apícola etc. Conocimos una particular bodega y almazara.
Además, en estas actividades se incluía la visita al Museo del Atún de Barbate. Recorrimos Zahara de los Atunes y recalamos en el Conjunto arqueológico Baelo Claudia sobre ruinas romanas de especial interés para comprender muchas costumbres que se conservan de esa época. Llegamos a Tarifa y en barco pudimos hacer un recorrido para ver cetáceos y peces. La emoción de participar como “espectadores privilegiados” de todo el quehacer de la gente del mar en esta tarea se reflejará –sin duda- en lo que los colegas van transmitir a sus públicos.
No todo giró sobre el mundo del atún sino que tuvimos increíbles momentos de contacto con la historia , la arqueología, la sociología que nos acercó a la vida cotidiana de culturas como la de los fenicios , cartagineses, romanos , árabes, judíos, cristianos, etc.
La ruta gastronómica fue exhuberante. Los cinco sentidos han podido rastrear todas las propiedades organolépticas del atún rojo, una verdadera joya del mar. También aprendimos a diferenciar entre mormos, contramormos, tarantelo y morrillos como los más ricos cortes del atún. Pudimos degustar una enorme variedad de los productos que se derivan de la pesca del atún pero también de los otros productos de la zona que complementan la alimentación de los lugareños: frutas y verduras , otros pescados y mariscos , vinos, pastelería, bombones de chocolate y salazones, etc.
Lo programado con abundancia es una muestra de una enriquecedora visita con anfitriones de excepción.
http://www.larutamilenariadelatun.com/raices/joyas-historicas/baelo-claudia/
http://www.larutadelatun.com/oro-rojo-de-la-almadraba-a-la-mesa/